
Zarautz acogió el sábado, 26 de abril, la primera edición de una jornada muy especial. Pese a la intensa lluvia, decenas de personas nos reunimos para compartir mucho más que un plato de arroz.
La iniciativa, bautizada como “Arroces diversos, Zapore anitz”, fue un lugar de encuentro, un espacio abierto para charlar, bailar, reír y disfrutar. Un espacio donde voluntariado, personas acompañadas por Caritas, trabajadoras, familias y vecinas y vecinos de Zarautz compartimos tiempo y mesa en un ambiente acogedor y lleno de vida. Una mañana que se tornó más en fiesta, si cabe, con la trikitixa de Gotzon (voluntario de Zarautz) y su grupo.
A los fogones, numerosas personas participantes y voluntarias de distintos programas: Trintxer-Emeki, Sorabilla, Hotzaldi, Aterpe, Bidelagun, la Pastoral de Personas Migrantes... Todas ellas pusieron lo mejor de sí para ofrecernos unas recetas sabrosas y variadas: arroz negro, paella de marisco, arroz con carne, arroz chaufa (típico de Perú), arroz vegetariano y arroz con pollo. Cada uno con su historia, con su sabor y su esencia. Muestra del éxito de las recetas es que en poco tiempo se terminaron todos los arroces.
Agradecemos especialmente la colaboración de Alzola Basque Water, que nos donó el agua mineral que sirvió para resaltar el sabor de las recetas. También de Kutxa Solidarioa que nos cedió las carpas que nos permitieron resguardarnos y mantener vivo el espíritu del encuentro pese a la lluvia.
Fue una preciosa mañana en la que nos sentimos comunidad: diversa, acogedora, alegre.
Gracias de corazón a todo el voluntariado que hizo posible este encuentro, especialmente al de Zarautz y a las personas de su parroquia, por su implicación, su cariño y su excelente organización. Y gracias a todas las personas que os acercasteis con ganas de estar, de aportar y de disfrutar.
Porque cuando el arroz se cocina con cariño, sabe a hogar. Y cuando se comparte, nos transforma.