fbpx Acompañar 4 - ¿QUÉ SUPONE ACOMPAÑAR II? | Caritas Gipuzkoa Pasar al contenido principal

Ficha 4

¿QUÉ SUPONE ACOMPAÑAR II?

Oramos

Jesús y la mujer samaritana (Jn 4, 8-15)

Una mujer de Samaria llegó al pozo a sacar agua y Jesús le dijo:

– Dame un poco de agua.

Pero como los judíos no tienen trato con los samaritanos, la mujer le respondió:

– ¿Cómo tú, que eres judío, me pides agua a mí, que soy samaritana?

Jesús le contestó:

– Si supieras lo que Dios da y quién es el que te está pidiendo agua, tú le pedirías a él, y él te daría agua viva.

La mujer le dijo:

– Señor, ni siquiera tienes con qué sacar agua y el pozo es muy hondo: ¿de dónde vas a darme agua viva? Nuestro antepasado Jacob nos dejó este pozo, del que él mismo bebía y del que bebían también sus hijos y sus animales. ¿Acaso eres tú más que él?

Jesús le contestó:

– Los que beben de esta agua volverán a tener sed; pero el que beba del agua que yo le daré, jamás volverá a tener sed. Porque el agua que yo le daré brotará en él como un manantial de vida eterna.

La mujer le dijo:

– Señor, dame de esa agua, para que no vuelva yo a tener sed ni haya de venir aquí a sacarla.

Reflexionamos

Acompañar supone confianza, que se construye mediante el encuentro y el diálogo, contrarrestando suspicacias, temores y dudas que las personas pueden tener sobre nosotras y nuestras intenciones de apoyo. En el pasaje, Jesús sabe que necesita dedicar tiempo al encuentro y al diálogo para lograr una actitud distinta de la mujer samaritana.

A veces, ponemos mucha carga en que las personas que apoyamos "deben" contarnos la verdad de sus situaciones complejas. Les pedimos que confíen, sin haber trabajado previamente esa confianza. La confianza hay que ganársela y requiere poner en juego nuestro "arte relacional" para hacer que las personas “opten por” confiar en nosotras. La confianza es un ejercicio de paciencia y de cuidado por nuestra parte, y un ejercicio de libertad por parte de la otra persona. También debemos comprender que, por distintas razones (dolorosas, seguramente), las personas ya no confíen en nadie.

La confianza la vamos construyendo ofreciendo tiempo, construyendo conversaciones alrededor de las inquietudes de las personas, compartiendo su cotidianeidad en el barrio, interesándonos por los motivos para seguir adelante con su vida, impulsando su proyecto de felicidad.

Nos preguntamos

1. ¿Cuál es nuestro nivel de confianza? ¿Crees que somos confiables para las personas que atendemos? Identifica personas, momentos o situaciones de tu labor en Caritas donde hayas sentido que las personas confían en ti.

2. ¿Dedicamos tiempo a pensar cómo ganarnos su confianza o cómo construir espacios de mayor confianza? ¿Qué dificultades tendríamos que resolver para generar confianza en las personas?

Para recordar

“Nuestro compromiso no consiste exclusivamente en acciones o en programas de promoción y asistencia; lo que el Espíritu moviliza no es un desborde activista sino, ante todo, una atención puesta en la otra persona, «considerándola como uno consigo»” (EG 199)

Glosario, música y anexo

AA: Apostolicam Actuositatem - Decreto del Concilio Vaticano II sobre el apostolado de los laicos (1965)

CDSI: Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia

EG: Evangelii Gaudium - Exhortación apostólica del papa Francisco sobre el anuncio del Evangelio en el mundo actual (2013)

FT: Fratelli Tutti - Enclíclica del Papa Francisco sobre la fraterniidad y la amistad social (2020)

LS: Laudato Si’ - Encíclica del Papa Francisco sobre el cuidado de la casa común y el medio ambiente (2015)

Anexo

"Necesitamos ejercitarnos en el arte de escuchar, que es más que oír. Lo primero en la comunicación con el otro, con la otra, es la capacidad del corazón para hacer posible la proximidad" (EG 171)

Te ofrecemos algunas preguntas abiertas que te pueden ayudar a estructurar una entrevista. Quieren ayudarnos a comprender las inquietudes, potencialidades y los sueños de las personas. Quizá ya las utilizas, más o menos, en tu labor en Caritas.

Siempre es necesario preparar el encuentro y organizar una entrevista sencilla, pautada y estructurada que dé pie a entablar una conversación con la otra persona, evitando preguntar a modo de interrogatorio.

También es importante cuidar los saludos, bienvenidas y presentaciones, no olvidar las sonrisas y procurar una mínima recogida de datos (no más de tres) al iniciar la conversación.